sábado, 14 de mayo de 2011

Revisión Histórica. De ayer a hoy (II)

Síganme…

La campaña presidencial de Men*m llegaba acompañada de un discurso sumamente triunfalista. El famoso hermanos y hermanas de mi patria, el salariazo y la revolución productiva eran alguno de los instrumentos que le valieron la elección. Su política inicial estaba ligada al peronismo, pero al asumir el poder, hizo todo lo contrario. Dicho por el, de haber contado lo que iba a hacer, no lo votaba nadie.

Guiado por el Consenso de Washington, desde un primer momento Men*m se dispuso a obedecer las ordenes del juez del planeta. Disciplina fiscal, políticas comerciales liberales, aperturas a inversión extranjera y privatización de empresas públicas eran algunos de los ítems del gobierno entrante.

Su primeros ministros de economía duraron lo que un suspiro. Primero fue Miguel Roig que falleció a los 5 días de asumir (el inicio de un régimen de mufa) y luego Néstor Rapanelli, autor del  Plan Bunge & Born, que estableció el control de precios y el cierre a importaciones con el fin de parar la inflación, aunque el plan fracasó y la recesión aumentó. Al poco tiempo, debió irse.

Su salida le dió paso a la asunción de Erman González, que como primera medida dispuso el Plan Bonex, que significaba el canje compulsivo de depósitos a plazo fijo por bonos externos, consecuente con una gran perdida para los pequeños y medianos ahorristas.

Para principios de marzo, el Turco nos traía otra sorpresita. El escándalo de González con la empresa swift le dio paso al nuevo caballito de batalla de Carlos. Mingo Cavallo fue designado Ministro de economía… Si, el tipo que dispuso el canje de deuda de las empresas al estado, ahora cambiaba de lugar. Pero no de ideología.

Como primeras medidas ejecuto el Plan de Convertibilidad, que busca deflación de precios y terminar hiperinflación. Entonces, nació moneda valor igual al dólar y se eliminaron los impuestos a industrias. El famoso 1 a 1.

La medida fue una primaverita. La gente de clase media accedía a viajes al exterior, compras y todos los chiches, pero la realidad es que esta medida trajo consigo una pérdida del salario real de ahí en más en continuo descenso.

Si bien el tipo de cambio favorecía las importaciones y favorecía a la modernización y tecnologización, iba en desmedro de la producción nacional y provocó el cierre de industrias y aumentó del desempleo. Las empresas nacionales no podían competir con las internacionales en relación a calidad-precio.

El auge liberalista del riojano no se hizo esperar y se dispuso a privatizar todo lo que tenia al alcance de su mano. Entre ellas YPF, Aerolíneas, ENTEL, el gas, la Caja de Ahorro, Obras Sanitarias, aeropuertos, correo, dos plantas siderurgias, el Mercado de Hacienda de Liniers, las radios y canales de TV, las rutas, los trenes. No se privatizó el aire porque no arreglaron con la naturaleza.

El plan apuntaba a reducir el monopolio estatal, sin embargo, ahora el monopolio cambiaba de dueños. Ya no era el Estado quien disponía de sus servicios, sino empresarios que ponían los precios que querían y reducían los servicios según las ganancias que podían dejarle.

No voy en tren…

El caso de los ferrocarriles fue el más resonante. Desde la época de Perón, que comenzó un proceso de nacionalización de ferrocarriles, que se incorporaron además de vías y vagones, miles de hectáreas los ferrocarriles eran nacionales. Hasta entonces, los ferrocarriles eran uso y abuso de los ingleses para llevarse materia prima de nuestro país.

Sobre esto, Scalabrini Ortiz mencionaba: “....... Los ferrocarriles constituyen la llave fundamental de una nación. La economía nacional, pública y privada, el equilibrio de las diversas regiones que la integran, la actividad comercial e industrial, la distribución de la riqueza y hasta la política doméstica e internacional están íntimamente vinculadas a los servicios públicos de comunicación y transporte`` Clarito. No lo vieron así.


Lo cierto es que solo en los ferrocarriles, las consecuencias fueron la desaparición entera de pueblos, ya que a las empresas no les rendían esos ramales. Entonces, Men*em les puso un plazo a las provincias para que se hagan cargo de los servicios de carga y pasajeros, costo imposible de pagar para una provincia.

Lo peor, que mas allá de los subsidios que se pagan para que se mejore el servicio, estas seguían en iguales condiciones. La falta de inversión de las empresas es cada vez más evidente, aunque lamentablemente, antes que se vaya el Turco nos dejo un lindo regalito: Prolongo las concesiones 20 añitos más.

Sin embargo, la desocupación no fue únicamente en el medio ferroviario. Unos 500.000 agentes de la administración publica, 170.000 de los trenes, 50.000 en YPF, 10.000 en la actual y tan defendida Techint, mientras que el Correo perdió casi 14.000 empleados.

Mas allá de todas la privatizaciones, en las cuales se recaudaron 10.000 millones de dólares y muchos mas en bonos de deuda, esta aumento de 50 a 90 mil millones durante el proceso menemista. ¿Dónde esta la plata?

Viéndolo de este punto resulta inentendible. Ellos defendían que las empresas publicas dan perdidas y fuentes de corrupción, y al privatizar, se rebajarían las tarifas, serian atraídos inversores extranjeros y por ende la creación de empleos y mejoramiento salarial. Nada de eso sucedió. Es mas, fue todo lo contrario.

Las barras y las estrellas se adueñan de mi bandera…

Entre liberación o dependencia, no caben dudas que se volcaron por la segunda, ¡y de que manera!. La relación de Men*m con Estados Unidos era excelente, al punto que en el conflicto del Golfo Pérsico envió tropas a la zona, así como apoyo a los yanquis en sus conflictos con Cuba.

Sin embargo, los norteamericanos quedaron bastante enojados por haber sido relegados por Telecom y Telefónica en la privatización de las telecomunicaciones. Claro, ¡como nos van a dejar afuera de semejante remate! Se habrán lamentado…

Es mas, el escándalo IBM-Banco Naci6n se supo que la compañía yanqui pagó una coima de hasta 120 millones de dólares para asegurarse el contrato informático. Todo vale.
Men*m se regalo a las políticas yanquis al punto de llegar a tener relaciones carnales. De imaginárselo, da asco.

Foto: www.panoramadiario.com

¿Otra vez?


En 1995, obtuvo su tan ansiada reelección con el 49,6 % de los votos, medida que había auto impuesto mediante una Reforma Constitucional. Uno de los motivos de esta fue que mucha gente se endeuda en dólares e introdujo mediante los medios pánico que este aumentase de precio. El famoso Voto Cuota.


La segunda parte de su gobierno estuvo signada por escándalos y corrupciones en las tres cámaras. La ida de Cavallo por las denuncias a Yabran, a tan solo un año de la reelección presidencial, dió paso a que Roque Fernandez se haga cargo de la economía tras la negativa de Roberto Alemann, Ministro del proceso.


Al final del mandato de Cavallo, la desocupación había crecido del 7% al 18 %, con una baja en la inflación pero una brutal secesión. Con Fernandez nada cambio, ya que la rescesión  el nivel de desempleo se acrecentaban mes a mes.


Mientras todos nos empobrecíamos, ellos se seguían llenando los bolsillos. Como María Julia Alsogaray, fue acusada de cometer 50 irregularidades en esa privatización y de quedarse con un millón de dólares de una garantía.

O las totales impunidades con las que se cometieron los atentados a la embajada de Israel, a la AMIA y el asesinato de José Luis Cabezas. Siga siga, diría un conocido juez de fútbol...

Y al final…

La fiesta menemista permaneció en nuestro país hasta el 24 de octubre de 1999, cuando Fernando de la Rua asumió el cargo con el 48,5 % de los votos. Nos acercamos al estallido…
En síntesis, durante estos 10 años de gestión, se privatizo todo lo que se pudo, lo que trajo consigo una masiva ola de desempleos que aun hoy estamos pagando. Así como la deuda externa se acrecentaba y la paridad cambiaria del 1 a 1 engañaba a más de un argentino. Men*m regó las semillas que el Proceso y Alfonsin le habían dejado…


 Otro pabellón que se abre…


Con la premisa de la unificación nacional, indulto a los culpables de la represión y la violación a los Derechos Humanos durante la última dictadura, tras los levantamientos de Seineldin. Al tiempo se lo condeno por el robo de bebes, pero a prisión domiciliaria en una cómoda estadía.

Otro delincuente que miente roba, gobierna y se va…


.Las elecciones presidenciales de 1999 dieron como triunfador a la Alianza de Fernando De la Rua-Chacho Álvarez. Mientras en un segundo plano quedaba Duhalde y en tercero… Cavallo.

La campaña de Chupete vino acompañada de un constante intento de eliminar la imagen de su inefable antecesor. La muestra cabal estuvo en su spot ``Dicen que soy aburrido´´, tratando de despegarse de la imagen festiva de Men*m, quien poseía una imagen negativa casi absoluta en el país… Por un tiempo, ya verán.

La pobreza, el desempleo y una caída fuerte del PBI eran una de las herencias que recibió, además de una deuda externa cada vez mayor y a pagar en un muy corto plazo.

Para paliar la crisis, De la Rua propuso un aumento impositivo sobre las clases medias y altas aunque resulto insuficiente para resolver los problemas económicos. La idea era bajar las tasas de interés y mantener la estabilidad monetaria, medida que le valió en gran parte la elección.

Al verse apretado por la situación, el Ministro de economía Machinea pidió auxilio al FMI y los bancos privados para reducir la presión de la deuda. Así, fue que consiguieron el Blindaje Financiero por 40.000 millones de dólares.

En marzo del 2001, Machinea se alejó del Gobierno y le dio lugar a Ricardo Lopez Murphy, que llegaba con objetivos de achicar el gasto del estado y aumentar la recaudación fiscal.

Para achicar el gasto público, redujo fondos de salud y educación, lo que produjo un gran rechazo social que le valió su salida 16 días después.

Pensar en Nada…

De la Rua, desesperado, llamó al padre de la criatura para que arregle el problema. Si, otra vez, de nuevo, aparece la figura de Domingo Cavallo. Esta vez, llego con promesas de crecimiento anual sostenido, rebaja de impuestos y propuestas apara reanimar la industria.

Primero, presento un Plan de Competitividad, que aprobaba impuestos a operaciones bancarias, aunque a los mercados y organismos internacionales no les gusto nada y decidió cambiar el plan por el Déficit Cero, con un nuevo recorte a la administración publica.

Esto tampoco ayudó, y el continuo ajuste contraía aún más la economía en el marco de un contexto internacional de recesión regional y global, que tampoco ayudaba a la Argentina a crecer.

En noviembre de ese año, se inició un plan para el pago de la deuda externa denominado Megacanje, aunque la delicada situación política de por entonces alejó todo tipo de inversores e incluso, la desconfianza entre los que ya estaban insertos en el sistema era tal que hubo un retiro masivo de fuerte depósitos bancarios.

Para evitar el quiebre del sistema, Mingo impuso restricciones que congelaban los fondos depositados, permitiendo solamente el retiro de 250 pesos por semana y dejando totalmente prohibido el envió de dinero al exterior. Por entonces aseguraba que el valor del peso y del dólar se mantendrían estables. Llegaba el famoso corralito…

Se viene el estallido…

La medida como era de esperar genero un terrible rechazo en la sociedad argentina. Todo diciembre se realizaron protestas y manifestaciones en contra de dichas medidas. El presidente, ahogado, buscaba alianzas con los demás partidos pero todos le dieron la espalda.

Aprovechando el clima de crisis, algunos intendentes argentinos –que si así fuere daría vergüenza ser argentino- organizaban una ola de saqueos para desestabilizar al todavía Presidente.

A la mañana del 19 de diciembre,  De la Rua se reunió tuvo una reunión con Eduardo Duhalde, De la Sota, Moyano, De Mendiguren y el Monseñor Casaretto de Caritas, entre algunos otros indeseables, para anunciar que aun apoyaban el Déficit Cero y la renegociación de la deuda, aludiendo también que los disturbios estaban controlados. La ecuación fue simple: seguía apostando a su plan. Y todos le soltaron la mano.

Los pedidos de renuncia del superministro Cavallo se hacían presentes a cada hora, en todo lugar. Al final de cuentas, el primero en irse termino siendo Mingo, es cierto. Pero esto vino acompañado con el mensaje de De la Rua (en que cual se equivoco tres veces!!! Porque no le salía…) declarando el Estado de Sitio, antes de desearnos las buenas noches… Fue conocida como la noche de las Cacerolas.

Al día siguiente, ese 20 de diciembre nos desayunábamos con las constantes manifestaciones y represión policial en la Plaza de Mayo, donde perdieron la vida cuatro compañeros, todos baleados por la policía.

A eso de las 7 de la tarde, ya rendido, se dio cuenta que la situación no daba para mas, y reunió a todos sus ministros para comunicarles que iba a renunciar.

Solo 45 minutos más tarde, tras las fotos, besos y llantos con su gente cercana, solo una pregunta invadía su cabeza. ¿Y ahora? Dicen que repetía una y otra vez. El helicóptero ya tenía las hélices encendidas..  El resto, es historia conocida.



Nos siguen pegando abajo…

Desde el comienzo de su gobierno, De la Rua propuso medidas que alivianaran los costos que el sistema jubilatorio presentaba. Se reducía la Prestación Compensatoria a todos aquellos que ganaran más de 640 pesos mientras se gestaban proyectos para reducir las jubilaciones superiores a $ 3.100. La medida era fuertemente impulsada por quien hoy lucha por el 82 % móvil, Patricia Bullrich. También eliminaron el Fondo de Incentivo Docente y se redujeron 360 millones de las Universidades.

Mientras tanto, para ``beneficiar´´ al trabajador presentaron la  Ley de Reforma Laboral, que  tenia como principal objetivo debilitar a los gremios y rebajar los salarios, medida que según Hugo Moyano estuvo impulsada por el FMI. Entre escándalos en el Senado que derivaron la renuncia de Chacho Álvarez a la vicepresidencia.


Mas de lo mismo…

En el rubro de política exterior nada cambio. El canciller Adalberto Rodríguez Giavarini apoyo la intervención de tropas en misiones de paz, formando parte de la milicia internacional constituida por Estados Unidos, a la vez que votaban a favor de la intervención en la violación de los DD HH en Cuba.


¿Quién se hace cargo de lo que hicieron?


Las protestas continuaban a diario y nadie quería hacerse cargo de la situación. Primero fue Ramón Puerta, presidente del Senado, luego Rodríguez Saa, con el famoso lema de ´´No pagamos más la deuda externa´´. Imaginese como le fue...

Su renuncia por ``falta de apoyo politico´´ volvió a poner en el candelero a Puerta, aunque esta vez se negó. Era el minuto de fama (y la jubilación de privilegio) de Eduardo Camaño, que convocaba elecciones legislativas para elegir presidente, la cual termino con Eduardo Duhalde (gran golpista interno durante esos años) al mando del poder.

Durante su gobierno, tuvo como prioridad estabilizar y reactivar la economía. Primero Remes Lenicov devaluó la moneda y pesificó forzadamente los depósitos en moneda extranjera, lo que produjo gran fastidio entre las empresas extranjeras. Era un cambio necesario.

Acorralado, pidió ayuda al FMI que le dio la espalda y al tiempo presento su renuncia para darle paso a Roberto Lavagna. Poco a poco el país se iba normalizando, la actividad económica crecía gracias a que el peso generaba un ritmo exportador y un crecimiento de la industria local.

Cambia todo cambia…

Llego el 2003, año en que los argentinos debíamos votar un presidente luego del caos de 2001. La desconfianza era muy grande, y el miedo era la sensación reinante sobre no volver a equivocarse.

Diferentes líneas se presentaban como alternativas. Un hasta entonces casi ignoto Néstor Kirchner llegaba como la nueva política, aunque pesaba sobre el un total desconocimiento publico.

La UCR, muy debilitada en cuanto al apoyo popular, largo dos de sus ex miembros más importantes. Elisa Carrio y Ricardo Lopez Murphy se presentaron por la Afirmación para una Republica Igualitaria y Recrear para el Crecimiento, respectivamente.

Mientras que por otro lado se presentaban Adolfo Rodríguez Saa y... aunque no lo crean... Carlos Men*m.

Los resultados arrojaron dos muestras claras: Un 24,5 % apostaba por una vieja política como la del riojano, mientras un 22,24 % apostaba a la nueva política.

En el ballotage, el Turco se dio increíblemente a la baja y Néstor asumía el mando… Comenzaba a forjarse un nuevo país….


Esta historia Continuara...

Fuentes:



http://www.lagazeta.com.ar/ferrocarriles.htm#4



Bibliografía:

 Los próceres tocan de Primera.
                     
 Hacia una nueva visión de la política social argentina. Bernardo Kliksberg.

Fragmento de las canciones:

Alfredo Zitarrosa. Adagio a mi país
Callejeros: 9 de Julio
                  Imposible
                 Señales
Ricardo Arjona: Mi país
                          Si el norte fuera el Sur

Bersuit: Se viene el estallido.
Mercedes Sosa: Todo cambia
Charly Garcia: Nos siguen pegando abajo.  
                        No voy en Tren.
Leon Gieco: Pensar en nada.

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